AUTOCUIDADO NO ES EGOÍSMO
Entiendo que a veces te sientas culpable por dedicarte tiempo para cuidarte. Es una sensación común, pero es importante recordar que el autocuidado es esencial para tu bienestar general. Muchas personas se sienten así porque han internalizado la idea de que priorizarse a sí mismos es egoísta o sinónimo de ser males personas.
Sin embargo, eso no podría estar más lejos de la verdad. Piensa en el autocuidado como llenar tu propia taza antes de poder llenar la de los demás. Si no te cuidas a ti mismo, ¿cómo puedes esperar estar en tu mejor estado para cuidar y apoyar a los demás?
No se trata de ser egoísta, sino de reconocer tus propias necesidades y darte el permiso para atenderlas.
Te propongo un ejercicio maravilloso que te aseguro revolucionará tu vida y te dará grandes dosis de satisfacción y bienestar: El tarro del autocuidado. Toma un frasco de vidrio o una caja bonita y dedica un momento a decorarla a tu gusto. A continuación, llena el tarro o la caja con pequeños recordatorios de actividades de autocuidado que te gusta hacer. Aquí te dejo algunas ideas:
- Salir a tomar algo con tus amigos.
- Visitar a alguien a quien te apetezca mucho ver.
- Hacer una caminata en plena la naturaleza.
- Hacer deporte.
- Sesión de belleza: manicura, cremas, peluquería, masaje, etc.
- Tomar un baño relajante con sales y música relajante.
- Escuchar tu música favorita.
- Bailar.
- Meditar durante unos minutos.
- Leer un libro que te guste.
- Hacer estiramientos o ejercicios de respiración.
- Dibujar o pintar.
- Ver tu película o serie favorita.
- No hacer absolutamente nada.
Cada vez que te sientas culpable por dedicarte tiempo para el autocuidado, recuerda que es un acto de amor propio y que te mereces cuidarte a ti mismo tanto como cuidas de los demás. El tarro o la caja del autocuidado puede ser un recordatorio tangible de que priorizarte a ti mismo no es egoísta, sino esencial para tu bienestar.
